Katsu (Toru Ohe) vuelve a su ciudad natal, un pacifico pueblo de pescadores huyendo, de lo que nos dejan suponer son problemas con la yakzua. Muy a su pesar, es reconocido por muchas personas, pero se resiste obstinadamente a reconocer su identidad a los mismos. Completamente convencido de poder cortar todos los lazos con su pasado, intenta ganarse la vida trabajando en un cine pinku (en el que pude reconocer algún cartel de Masaru Konuma). Es ahí donde entabla relación un tanto ridícula con Yuko, la dueña del cine. Una mujer despechada que ha sido cruelmente abandonada por su marido, y que se cuelga de él para aliviar su carga emocional.
Al poco tiempo de superar la soledad comienza a preguntarse si hizo lo correcto regresando. Es cuando conoce a una extraña pareja a la que espía tras los matorrales (por puro placer personal) mientras practican sexo campestre y con los que acaba creando una extraña amistad. Estos le presentan una amiga, con el único propósito de llevarlo a aceptar su verdadera identidad, cosa que le enfurece y lo empuja a su abusar sexualmente de ella.
Se mantiene por igual el flujo de sexo y humor durante la película, sobre todo llama la atención la escena en la que están jugando en la playa y Rie Nakagawa completamente desnuda, salta sobre ellos. Kumashiro llama la atención deliberadamente sobre la completa desnudez utilizando un alfiler para rayar la emulsión de de la película por encima de las zonas sexuales de los actores, creando unos garabatos blancos. Esta fue una práctica bastante común con las películas extranjeras importadas, cuando tales escenas no podían ser cortadas de la película sin destruir la continuidad narrativa.
Por lo general, sólo se piensa en Woman with red hair (1979) y no en Lovers are Wet como obra maestra de Kumashiro, haciendo caso omiso de esta cinta en su carrera, mientras que la película es sin duda digna de todos los elogios. Ambas películas son igualmente significativas en desarrollo de la industria pinku.
Esta película fue planeada originalmente como parte oficial de la nureta series. Al parecer, nureta (húmedo) era una palabra de moda que aseguraba el éxito de taquilla. Lo mismo sucedía con SEX, tal cual en inglés, incrustado entre Kanjis, era un reclamo para el público vicioso que petaba las salas en los estrenos.
A Kumashiro no le importaba el titulo de la película. Paso a ser un fijo en plantilla para Nikkatsu a causa de la libertad que ofrecían, animando a los cineastas a hacer algo diferente. Simplemente, debían estar deleitadas con generosas escenas de sexo y un título que vendiese, por lo tanto podía hacer cualquier tipo de película que eligiera. Kumashiro trabajó diligentemente en el estudio, produciendo algunas de las mejores películas eróticas.
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